Las hipotecas para no residentes son una modalidad de préstamos hipotecarios que conceden las entidades bancarias a extranjeros o bien ciudadanos que no tengan vivienda en el territorio nacional, esto es, que bien no hayan continuado en el territorio nacional más de ciento ochenta y tres días a lo largo del año natural o que no tengan el núcleo de sus actividades en España. Esto es, esta modalidad de préstamo hipotecario es válida para aquellas personas que paguen sus impuestos fuera del territorio nacional sin importar lo más mínimo su nacionalidad.
Condiciones a cumplir de hipotecas para no residentes
Las condiciones que deben cumplir los ciudadanos que requieran una hipoteca para no residentes son más exigentes que las de aquellos ciudadanos que cuentan con la vivienda en España.
¿Por qué razón? La razón radica en que caso de morosidad y también impago, hay una complejidad considerablemente mayor para embargar recursos del extranjero y la única garantía sería el inmueble adquirido en España.
Por esta razón, el porcentaje de financiación que se otorga en las hipotecas para no residentes no es tan elevado como en el resto de préstamos hipotecarios, lo que implica que el cliente del servicio que desee acceder a una hipoteca, va a deber tener una cantidad mayor de ahorro para abonar los gastos iniciales. El porcentaje destinado de financiación para esta modalidad de hipoteca, se halla en torno al sesenta por ciento. En lo que se refiere al periodo de amortización, este suele ser frecuente que se ubique en torno a los veinte años como máximo.
Respecto al tipo de interés aplicado a la cuota del capital prestado, este es superior en el caso de las hipotecas para no residentes que para la de los residentes, en parte debido a una mayor complejidad en cumplir la contratación de productos vinculados con la hipoteca, como puede ser el caso de la domiciliación de la nómina. Además de esto, con una hipoteca para no residentes a tipo fijo, el cliente del servicio va a saber con precisión el importe a devolver y va a poder arrendar la residencia sabiendo la rentabilidad que conseguirá.
Documentación precisa para pedir una hipoteca para no residentes
Hipotecas para no residentes, documentación necesaria
La documentación precisa en el momento de pedir un préstamo hipotecario para no residentes sería la siguiente:
- Copia del NIE o bien pasaporte.
- Certificado señalando que no se es residente en España.
- Contrato laboral.
- Últimas nominas conseguidas en tu país de vivienda.
- El extracto bancario del último año donde se ingresa la nómina.
- Declaración fiscal.
- Certificado de vivienda fiscal.
- Contrato de la residencia a adquirir.
- 3 últimos recibos de deudas pendientes que se hayan anulado.
Además, va a ser preciso contar con de toda la documentación precisa traducida al de España y una cuenta corriente de España, como presentar los originales en persona, si bien es cierto, que poco a poco más entidades de finanzas están admitiendo percibir la documentación escaneada.
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Los requisitos de las hipotecas para no residentes, son más amplios y complejos que los que se demandan a un ciudadano español.
¿De qué manera lograr un préstamo para no residentes?
Siendo extranjero o bien tener vivienda fiscal fuera y estimar pedir una hipoteca para adquirir una casa en España, se te presenta una opción: la hipoteca para no residentes. Una hipoteca con condiciones más estrictas y con menos financiación de la normal, pero indudablemente, una alternativa válida si se quiere adquirir una residencia en el país, mas info aquí.
Concretamente, en los préstamos hipotecarios para no residentes en España, se financia más o menos el sesenta por ciento del valor de la tasación de la residencia. Una financiación, que así mismo se define para los residentes españoles que deciden adquirir una segunda residencia en el territorio.
Estas condiciones se pueden llegar a progresar con un bróker hipotecario especialista en hipotecas para no residentes. Este perfil tiene la posibilidad de progresar las condiciones, siempre que el perfil y la solvencia del interesado sea adecuada.
Documentación precisa para las hipotecas para no residentes
Para acceder a una hipoteca para no residentes, la entidad pide al interesado cierta documentación económica para poder de esta manera valorar la firmeza del perfil del interesado no residente. Ciertos países tienen preferencias y comodidades en el momento de pedir una hipoteca, como por poner un ejemplo los alemanes y los británicos quienes tienen más ofertas. Además de esto, se puede destacar que las entidades de finanzas solo ofrecen este tipo de hipotecas para no residentes a ciertas nacionalidades europeas y ciertos países occidentales fuera de la UE.
Esta documentación, deberá ser original y va a deber presentarse personalmente en la oficina pertinente y en el instante de la firma ante notario. Posiblemente, algunas entidades te ofrezcan la sencillez de mandar la documentación escaneada o bien por correo, pero generalmente debe entregarse en persona.
La documentación que se debe presentar para pedir la hipoteca para extranjeros es:
-Copia del NIE y pasaporte.
-Contrato laboral y certificado de la empresa donde salga el cargo, la antigüedad y el sueldo.
-Reporte crediticio.
-Extracto bancario de los últimos seis meses.
-Las tres últimas nóminas del país en el que radica.
-Declaración de la renta.
-Los seis últimos recibos de las deudas pendientes: de préstamos, hipotecas, etcétera.
En caso de que el demandante sea autónomo, entonces los documentos a dar serían:
-Carta contable.
-Cuentas auditadas de los dos últimos años.
-Contrato de la residencia que se quiere adquirir.
-Declaración de la renta de los últimos dos años.
¿Qué ocurre con las divisas en estas hipotecas para no residentes?
Con la Ley Hipotecaria del dos mil diecinueve, el prestatario de la hipoteca tiene el derecho de efectuar la conversión del préstamo a la moneda extranjera donde tenga su vivienda habitual o bien el mayor porcentaje de propiedades. Con lo que, si esta persona ya cuenta con una hipoteca puedes pedir en cualquier instante al banco pertinente el cambio de divisa.
Esto, supone un enorme peligro para muchas entidades de finanzas. Con lo que han limitado su producto financiero a residentes en ciertos países de la UE y países con políticas monetarias admisibles.
